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Megas son como las meigas, nadie las ve pero haberlas ahílas

Creo que a día de hoy puedo contar la llamada mas fuerte que me ha pasado en todo lo que llevo trabajando….

 

 Aunque también es cierto que últimamente llevo una rachita buena…

 

Los otros días una chica mientras me daba sus datos soltó dos eructos que para mi se quedaron, el primero me dejo cortada, pero en el segundo no tuve mas que reírme en su cara…

 

Luego tuve a una señora sudamericana que decía que “las megas” eran muy importante en su vida, que la lentitud le molestaba…

Y encima me dice que el servicio era muy molesto porque de pronto de madrugada le sonaba el teléfono, lo cogía asustaba y preguntaban por marianito… encima no preguntaban ni por ella… la señora tenia un acento raro, me lo estaba contando en un tono entre pena y enfado… y yo, no tuve mas que poner el mute y descojonarme con mi compi de al lado….

 

Pero lo mas fuerte de todo llega al final de la tarde… me llamo un señor para configurar su conexión wifi, el hombre conecta pero al colgar deja el teléfono, imagino que sin darse cuenta, descolgado… por lo que empieza a oír como se lo monta con su mujer, oigo como la señora empieza a decir “me gusta, me gusta” puse el altavoz para no reírme yo sola y compartir… pero de pronto el señor dijo: “ espera” puso música y jamás volvimos a oír los diálogos… ahí ya fue cuando decidí colgar que había cola y ya la llamada perdió la gracia..

 

 

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